Los obispos han escrito una carta para agradecer al Pontífice las referencias al archipiélago en sus últimos viajes e invitarle de nuevo a visitarlo
El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), César García Magán, ha manifestado este martes que «el Atlántico se está convirtiendo en un cementerio» al comentar una posible visita del papa Francisco a Canarias por la situación migratoria que allí se vive.
El también obispo auxiliar de Toledo ha comentado, durante la rueda de prensa final de la Comisión Permanente de la CEE, la última tragedia en El Hierro que, ha dicho, es un dolor para el Papa y también para la Iglesia: «Tenemos que sentir el dolor cuando una vida humana se pierde en circunstancias tan trágicas».
Sobre la hipotética visita del Pontífice al archipiélago, ha dicho que no le consta que los obispos de Canarias hayan tenido precisiones sobre el tema, más allá de lo manifestado por Francisco. En cualquier caso, ha dicho que los obispos han escrito al Papa para agradecer las referencias en los últimos viajes y para volver a invitarle.
Y ha concluido con la siguiente reflexión: «El tema de las migraciones no es un problema que tenemos los estados del sur de Europa, sino que tiene que ser un problema coordinado, solucionado por todos los países, en origen y en destino».
Aborto
García Magán también ha reaccionado a las últimas cifras de abortos en España, que han crecido significativamente: «Es una gran desgracia. Un drama y una desgracia social». Y ha reiterado que la defensa de la vida humana «es un pack», pues incluye «el momento inicial, el final y el intermedio».
Preguntado por la intención del ministerio de Sanidad de crear un registro de objetores al aborto, ha añadido: «La objeción de conciencia es un derecho fundamental. […] Si sirve para tener fichados, controlados a esos médicos o enfermeras y que eso tenga repercusiones en su carrera profesional es muy grave».
Ofensas a los sentimientos religiosos
Sobre la eliminación del delito de ofensa a los sentimientos religiosos, el portavoz episcopal ha reiterado la posición ya fijada por él mismo y por el presidente, Luis Argüello. «Es llamativo que cuando los sentimientos de las personas constituyen un motivo de ley, haya otros sentimientos que no se protejan y queden reducidos a la nada», ha explicado.
En su opinión, esta decisión reduce la dimensión religiosa, que «ya no es un bien jurídico que proteger», de modo que una parte no pequeña de la sociedad española «se ve en la indefensión».
Belorado, abusos, terapias de conversión
Estos no fueron los únicos temas que surgieron durante la rueda de prensa. Preguntado por las terapias de conversión, ha señalado que si se hacen o se han llevado a cabo «son rechazables», como ha dicho la Santa Sede.
Sobre la cuestión de los abusos, ha explicado que es posible que en la próxima Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española se fije una fecha para un acto público de reparación y reconocimiento de las víctimas.
Del mismo modo, ha mostrado su apoyo al arzobispo de Burgos, Mario Iceta, ante la situación de Belorado que, si bien no se ha tratado en las reuniones, sí se ha hecho de modo informal. García Magán ha subrayado la «paciencia» del arzobispo en este caso.
Ante el Congreso de Vocaciones, que se celebrará el próximo mes de febrero y que cerrará el plan pastoral de la CEE, ha reiterado que la primera vocación es el bautismo.
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